Aunque me resistía a ir, prealeció l criterio de Lupita. Consideraba importante entrevistanos con ese canalla.
Bajó una señora gorda pero gorda de veras. Tenía los fientes verdes con una pátina nauseabunda. Ella alegaba más que n merololico. Sólo s trataba de saber para qué me pedía que fuera a verlo. Sus ·"muchachitos" son los hombre más odiados por el pueblo: cortan la luz,
A mí me la habían cortado, a pesar de que exitía una advetencia de que el caso estaba subjudice.
Tras apuntar i nombre subió a su oficina dicieno que su jefe no estaba y que llegaría en una hora o menos...
Eperamos. Lo vimos llega en una camioneta de la CFE. Era un hombre peqqeño, con una cabeza de ahuacate y una mirada venenosa.
Era Muuuuugica, Embistió y mugió en su oficina.
Mentira que ordenara los cortes de luz. Pero que el usuario tuviera la certeza de que no se le pondría ni medidor ni luz, si no pagaba la deuda de la persona que había contratado el servicio cancelado desde hacía unas horas.
Dijo que sabía que ni predios, casas ni el dueño enía obligación de pagar la deuda de la persona que contrató el servicio. Y que sabía que tenía la obligaci´n de respetar la petición de un ciuadadano de que se le proporcione el servicio electrico y hacer un contrato de inmediato.
Pero, dijo enfáticamente Múgica que no se daría ningún servicio en mi casa si no se pagaba la deuda del precio. Y punto.
Tras a oir al pequeño dictador, nos fuimos de inmediato con la C. JEFA DE SERVICIOS DE LA PROFECO CUERNAVACA,Lic, Itzel Morales.
Al oir lo anterior se indignó. Cambió su rosro de color. CASI ROJA y con los ojos centelleantes, dijo que era el colmo que se estuviera ante un caso en que en la audiencia se compromeiera con la Ley y con el deber ineluctable de conectar el srvicio al ciudadano sin ningún lastre de deudas anteriores por otra persona, así fuera de la misma casa, y que semejante actitud perversamente hipócrita y mendaz no se podía tolerar.. Dijo que hablaría con superintendente para que ordenara de inmediato el servicio de luz y que asimismo hablaría con la PROCURADORA GENERAL DE PROFECO, en México.
Me dio ánimos y por lo pronto me exhortó a presentar una nueva queja por la negativa del srvicio lo que además de causar una nueva sanción a la CFE, sería muy importante oir de voz del propio AÑEJANDRO LEO por quédio órdenes a UUUUUUgica de cancelar el srvicio al ciudadano de la tercera edad, con una enfermedad terminal y que habita solo von su hijo menor de 13 años la casa totalmente a oscuras,
Bajó una señora gorda pero gorda de veras. Tenía los fientes verdes con una pátina nauseabunda. Ella alegaba más que n merololico. Sólo s trataba de saber para qué me pedía que fuera a verlo. Sus ·"muchachitos" son los hombre más odiados por el pueblo: cortan la luz,
A mí me la habían cortado, a pesar de que exitía una advetencia de que el caso estaba subjudice.
Tras apuntar i nombre subió a su oficina dicieno que su jefe no estaba y que llegaría en una hora o menos...
Eperamos. Lo vimos llega en una camioneta de la CFE. Era un hombre peqqeño, con una cabeza de ahuacate y una mirada venenosa.
Era Muuuuugica, Embistió y mugió en su oficina.
Mentira que ordenara los cortes de luz. Pero que el usuario tuviera la certeza de que no se le pondría ni medidor ni luz, si no pagaba la deuda de la persona que había contratado el servicio cancelado desde hacía unas horas.
Dijo que sabía que ni predios, casas ni el dueño enía obligación de pagar la deuda de la persona que contrató el servicio. Y que sabía que tenía la obligaci´n de respetar la petición de un ciuadadano de que se le proporcione el servicio electrico y hacer un contrato de inmediato.
Pero, dijo enfáticamente Múgica que no se daría ningún servicio en mi casa si no se pagaba la deuda del precio. Y punto.
Tras a oir al pequeño dictador, nos fuimos de inmediato con la C. JEFA DE SERVICIOS DE LA PROFECO CUERNAVACA,Lic, Itzel Morales.
Al oir lo anterior se indignó. Cambió su rosro de color. CASI ROJA y con los ojos centelleantes, dijo que era el colmo que se estuviera ante un caso en que en la audiencia se compromeiera con la Ley y con el deber ineluctable de conectar el srvicio al ciudadano sin ningún lastre de deudas anteriores por otra persona, así fuera de la misma casa, y que semejante actitud perversamente hipócrita y mendaz no se podía tolerar.. Dijo que hablaría con superintendente para que ordenara de inmediato el servicio de luz y que asimismo hablaría con la PROCURADORA GENERAL DE PROFECO, en México.
Me dio ánimos y por lo pronto me exhortó a presentar una nueva queja por la negativa del srvicio lo que además de causar una nueva sanción a la CFE, sería muy importante oir de voz del propio AÑEJANDRO LEO por quédio órdenes a UUUUUUgica de cancelar el srvicio al ciudadano de la tercera edad, con una enfermedad terminal y que habita solo von su hijo menor de 13 años la casa totalmente a oscuras,
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